La presidenta del Parlamento autonómico con representantes de las 55 entidades católicas que se adhieren al Pacto Nacional por el Derecho a Decidir

La presidenta del Parlamento autonómico con representantes de las 55 entidades católicas que se adhieren al Pacto Nacional por el Derecho a Decidir

Política

La multiplicación de los panes, los peces y las entidades católicas a favor de un referéndum independentista

Hace unos días 55 entidades de la Iglesia católica se adherieron al Pacto Nacional por el Derecho a Decidir. Faltaron muchas asociaciones religiosas y congregaciones; además, las que lo firmaron se multiplicaron.

4 noviembre, 2013 16:58

El último día del mes pasado, Núria de Gispert, presidenta del Parlamento autonómico, recibió a un nutrido grupo de entidades de la Iglesia católica que se había adherido al llamado Pacto Nacional por el Derecho a Decidir.

En total, 55 asociaciones. El único punto en común: la defensa de un "derecho irrenunciable" que, lejos de ser tema religioso, se debe materializar en la celebración de un referéndum de independencia.

Sin embargo, tras comprobar que entre las entidades solo aparecen jesuitas, claretianos, escolapios y carmelitas descalzos, ¿hay tantas entidades de estas cuatro congregaciones en Cataluña como para llegar a 55? Sí, y más todavía; pero tiene su explicación.

Según publicó este domingo el blog Germinans Germinabit, lo que se está dando alrededor del Pacto Nacional por el Derecho a Decidir en el ámbito religioso es la multiplicación de los panes y los peces, "ya que hay algunas entidades que se multiplican con una gran facilidad, favoreciendo que el número final quede tremendamente abultado".

Engordar la lista de elegidos

Así, por ejemplo, entre los jesuitas que firmaron a favor de que se celebre un referéndum secesionista en Cataluña figuran Fundació Jesuites en l'Educació, Casal Loiola, Cova de Manresa y Centre d'Estudis Cristianisme i Justicia, "todas" dependientes de la Compañía de Jesús en Cataluña, que también aparece en la lista de los 55 elegidos.

Unos jesuitas que, a su vez, "forman parte" del Secretariado de la Unión de Religiosos de Cataluña, que también está en la lista. Algo similar ocurre con los claretianos, que además de figurar como tal, Claretians de Catalunya, firman como Fundació Claret y Editorial, Llibreria i Distribuïdora Claret.

También se "multiplican" las Hospitalidades de la Virgen de Lourdes, que aparecen en la lista como Fundació Hospitalitat Mare de Déu de Lourdes, así, en genérico; pero también en sus secciones locales: Hospitalitat MDL de Barcelona, Hospitalitat MDL de Terrassa y Hospitalitat MDL de Sant Feliu, pese a que todas las secciones "funcionan como una sola", organizan sus actos juntas y tienen una sola web.

Otro ejemplo, la Federació de Cristians de Catalunya, "una auténtica cantera de cuadros dirigentes de Convergència i Unió", que firma la lista de los 55 y en la que se incluye, también, los Equips de la Pastoral Política i la Comunicació y la Agència Cristiana de Notícies Flama, que "son simplemente apartados de la misma Federació".

Los que no están

Con esta profusión de entidades parece esconderse, pues, que como mínimo la Iglesia católica en Cataluña está profundamente dividida en temas terrenales. Todo lo contrario de lo que podría suponerse al leer que son 55 entidades las que se unen a la reivindicación de celebrar un referéndum de autodeterminación.

En la lista no hay ni una sóla diócesis, de las once que conforman la Tarraconense; "no hay especificamente ninguna parroquia"; como Cáritas, únicamente aparece la de Tarragona; y no hay rastro de las congregaciones benedictinas -pese a su mediática Teresa Forcades y al abad de Montserrat-, de los maristas, los salesianos o las vedrunas, entre otros. Ni una sola realidad monacal.

Eso sí, entre los que lideran -o lo han hecho en los últimos años- algunas de las 55 elegidas están Josep María Cullell, ex consejero de CiU y ex concejal en Barcelona, y Antoni Comas, ex consejero de la Generalidad.