Una vez más, la decisión de Pere Navarro de desmarcar el PSC del PSOE en el Congreso, en una moción que recordaba que la soberanía nacional recae en todo el pueblo español, ha recibido los aplausos de CiU.
Al margen de la tensión que produce en el seno del PSOE una decisión como la adoptada por el PSC en la Cámara Baja, tal y como han manifestado esta misma semana, entre otros, José Bono, las JSE o Susana Díaz, Josep Antoni Duran i Lleida ha felicitado a los socialistas de Cataluña, este viernes, a través de su carta semanal a la militancia de Unió Democràtica de Catalunya.
El líder de los democristianos ha mostrado su "comprensión" con la decisión de los diputados del PSC, que en su opinión están en una encrucijada que "no es fácil", y ha desvelado que, alguno de ellos -sin citar sus nombres-, incluso, se abstuvieron sufriendo porque "con el corazón estaban totalmente en contra de las tesis de Rosa Díez".
"Lo pasaron mal con su propia abstención"
Según Duran i Lleida, estos diputados del PSC "lo pasaron mal, tanto ante el sí del PSOE, como de su propia abstención". Por lo que, ha añadido en la carta semanal, "tenemos la obligación de reconocer el esfuerzo actual del PSC". Y se ha mostrado en contra de los que apuestan por la ruptura de los dos partidos: "Sería un desastre para Cataluña".
El dirigente nacionalista ya felicitó el desmarque del PSC respecto al PSOE hace unos meses. Ante una propuesta en el Congreso presentada por CiU e ICV-EUiA pidiendo que el Gobierno convocara un referéndum de independencia en Cataluña, el PSC votó a favor; el PSOE, en contra. Entonces, Duran i Lleida se despachó con un: "¡Felicidades, PSC!".
En esta línea, el portavoz de CiU en el Congreso ha criticado la decisión del PP y del PSOE en la votación de la moción propuesta por UPyD, por hacer "seguidismo" de la formación magenta, partido al que ha calificado de "minoritario", pese a que aquellos obtuvieron casi 130.000 votos más que los nacionalistas en las últimas elecciones de 2011. Si bien es cierto que el reparto de escaños hizo que CiU tenga 16 asientos en la Cámara Baja y UPyD, cinco.