Esta no ha sido una buena semana para la líder del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho. El jueves, Francisco Marco, el director de Método 3, sacó un libro en el que culpa a la popular del espionaje en La Camarga. El viernes, El Mundo publicó que su hijo, el pequeño Manuel, es fruto de una antigua relación con el ex ministro de Trabajo Manolo Pimentel. Sánchez-Camacho ha estado en boca de todos, pero no para bien: el programa El Intermedio de La Sexta la llegó a presentar a lo Tim Burton con la estética de La novia cadáver bajo el título de "la presidenta cadáver".
¿Está acabada la carrera de Sánchez-Camacho? Hay quien así lo cree. Tanto, que en los últimos días la rumorología ha puesto nombre y apellido a su posible sustituta: Esperanza García. Se trata de una joven abogada cuya cara es cada día más conocida para el público catalán. García, alta y morena es, a sus 38 años, una firme defensora de los postulados del PP, el partido al que se afilió en octubre de 2010 y por el que da la cara en los principales debates de TV3, TVE y de algunas cadenas de radio como RAC1. García aboga por el PP también desde su columna en El Periódico.
Es quizá por el incremento de su presencia mediática por lo que se ha disparado el rumor de que García podría convertirse en sustituta de Sánchez-Camacho y encabezar la lista del PP al Parlamento autonómico en las próximas elecciones previstas, en principio, para el otoño de 2016. García cuenta con muchas virtudes. Su buena presencia y su capacidad de palabra son muy llamativas, pero puede que su principal virtud consista en haber dejado Ciudadanos para hacerse del PP en un momento en el que, según las encuestas, muchos votantes planean hacer el camino inverso.
Un rumor... "por los enemigos de García"
García fue un descubrimiento de Albert Rivera. El líder de Ciudadanos la tomó de la mano en 2007 y la presentó como cabeza de lista de su formación a las municipales barcelonesas de aquel año. Todo era euforia para los de Ciudadanos en aquella época, porque contra todo pronóstico habían conseguido tres escaños en las elecciones al Parlamento autonómico de 2006. Pero la buena suerte se terminó y García no logró representación. "Para determinados problemas, tomo más soluciones típicamente de derechas y para otros problemas, más soluciones de izquierdas", declaró durante la campaña la candidata a la alcaldía de Barcelona. Tres años después, en 2010, la abogada volvió a ser noticia al anunciar su afilición al PP, un partido inequívocamente conservador.
Pero, ¿qué hay de cierto en los rumores? ¿Tiene García posibilidades reales de ser la sustituta de Sánchez-Camacho? Fuentes cercanas a la presidenta del PP catalán contestan a esta pregunta con un no rotundo. "Si Esperanza García está en los medios defendiendo al PP, es por su amistad con Alicia Sánchez-Camacho", aseguran. "Sánchez-Camacho la ha ayudado, porque se llevan muy bien y también porque García es una muy buena tertuliana", añaden las mismas fuentes.
Y agregan que es muy difícil que, hoy por hoy, García haga carrera política, pues su presencia en el partido se limita a formar parte de la ejecutiva por su pertenencia a una sectorial. "Este rumor ha sido articulado por los enemigos de García", concluyen estas fuentes. Además, insisten en que la carrera de Sánchez-Camacho "no está ni mucho menos acabada". El entorno de Alicia se muestra convencido de que la popular podrá demostrar en los tribunales que no tuvo "nada que ver" con el famoso episodio del espionaje en La Camarga.
Otros nombres
Otras fuentes del PP consultadas por CRÓNICA GLOBAL no lo tienen tan claro, pero sí descartan que García pueda convertirse en la sustituta de Sánchez-Camacho, entre otras cosas, porque "nadie la conoce en Madrid". Eso no impide que en las quinielas haya otros nombres como posibles reemplazos de Sánchez-Camacho, quien se convirtió en líder del partido tras derrotar a Montserrat Nebrera en un controvertido congreso celebrado en julio de 2008.
La rumorología, de nuevo, sitúa a dos personas del equipo de Sánchez-Camacho como posibles candidatos a sustituirla. Se trata de Dolors Montserrat y de Enric Millo, el actual portavoz del partido. A favor de Montserrat juega su paso por Madrid y su conocimiento de la sede central del PP, pero otros factores, como su juventud y su escasa presencia pública, no ayudan a que se pueda postular como presidenta del PP catalán. Millo es una de las personas de confianza de Sánchez-Camacho y un político con experiencia bregado en mil batallas, pero el hecho de que proceda de otro partido, Unió, puede ir en contra de su ascenso.
No son los únicos nombres que suenan como posibles relevos de Sánchez-Camacho. Xavier García-Albiol sigue una ruta ascendente desde que se convirtió en alcalde de Badalona. Y entre las fuentes consultadas se menciona a Alejandro Fernández, líder del PP de Tarragona, quien, según parece, tendrá algo que decir sobre el futuro de la formación popular en Cataluña.