En las últimas semanas, se multiplican las declaraciones de prestigiosos juristas, economistas y autoridades comunitarias advirtiendo de que una hipotética independencia de Cataluña la dejaría fuera de la Unión Europea.
Ahora es el turno de Jean-Claude Piris, director de los servicios jurídicos del Consejo Europeo entre 1988 y 2010, uno de los juristas más reconocidos en el ámbito del derecho comunitario.
"Es peligroso crear falsas ilusiones a la gente sobre una independencia unilateral. Hay que decir la verdad: si Cataluña emprendiera esa vía, supondría un largo camino que requeriría modificar la Constitución, y los tratados comunitarios (porque cualquier nuevo ingreso requiere cambios). Una simple declaración de independencia no tiene efectos jurídicos" ha señalado en una entrevista publicada este martes en El País.
"Una declaración unilateral no convierte a un Estado en independiente"
Piris es mucho más contundente e insiste en que "la pertenencia o no a la UE no depende solamente de la negociación, sino del estatus jurídico, de las condiciones que establece el artículo 49".
"La Constitución española dice que el territorio español es indivisible. Habría que cambiar la Constitución, que el nuevo Estado fuese reconocido. Y eso llevaría muchísimo tiempo. Y habría que ver cuáles son las consecuencias. ¿Todas las comunidades que quisieran podrían independizarse?", se pregunta.
E insiste:
"El debate jurídico es muy débil en España. Incluso en la Comisión Europea, cuando dice que Cataluña tendría que pedir la entrada como un Estado tercero. Porque hacer una declaración unilateral no significa que se conviertan en independientes ni que puedan pedir su entrada".
"El derecho de autodeterminación no es universal"
El experto indica que "las tres condiciones que existen para que un Estado pueda pedir su ingreso en la UE son que sea un Estado reconocido por la comunidad internacional, que sea europeo y que cumpla el artículo 2 de los tratados, que establece, entre otras cosas, que se aplique el Estado de derecho. Y para ello su nacimiento tiene que ser legal".
Y subraya que "no es cuestión de expulsión". "La UE no expulsaría a nadie (nunca lo ha hecho). Todo depende de las condiciones de nacimiento del nuevo Estado. El derecho de autodeterminación no es universal", explica.
Piris reconoce que "la sucesión de Estados es lo más difícil en derecho internacional" y que "hay que ir caso por caso", por lo que otras situaciones anteriores, como la independencia de Argelia o los casos de Groenlandia o Escocia no deben tomarse como referencia.
Según Piris, "en Bruselas existe la convicción de que esto se resolverá de manera interna". "Si Cataluña proclama su independencia tras un referéndum, eso no basta para que sea reconocido como un Estado y, por tanto, para que sea un país candidato a la UE. Mas lo sabe", concluye.