Después de 18 meses de hablar del coronavirus hemos de dejar de hacerlo porque entramos en otro estadio: ahora, el 10% de no vacunados llenan los hospitales europeos. En Austria dicen que los no vacunados no salgan de casa por ser un peligro público...
Así, la información publicada está por otro asuntos políticos, económicos y morales. Los políticos: en Barcelona, que la ERC de Ernest Maragall ha roto con la alcaldesa Ada Colau porque Ada sigue los pasos de su antiguo partido, el socialista.
En Madrid, los populares se hacen la guerra con descaro: el insustancial Pablo Casado tiene celos de la populista Isabel Díaz Ayuso porque Madrid es el centro del mundo, y utiliza al popular alcalde Almeida como pantalla de efecto preventivo.
Pablo Casado no estuvo fino el pasado fin de semana cuando dijo que en Valencia se había producido un aquelarre, no dijo que de brujas para no ofender a las brujas…
El arzobispo de Barcelona ha pedido perdón en nombre de la Conferencia Episcopal Española por la pedofilia, que no solo es un problema católico, sino de la Iglesia protestante que nos abochorna a todos, creyentes o no creyentes, por el que Benedicto XVI dimitió.
La actualidad informativa es un tren permanente que no descansa nunca…