Los lazos se usan para muchas cosas. Principalmente para atar y fijar. Los de seda se utilizan para adornar el vestido o el pelo. Pero sobre todo se han utilizado para apresar depredadores, especialmente zorros. Se sigue haciendo. Hoy es el tema principal de la relación entre el Estado y Cataluña. El lazo. Que lo quiten de las pareces de edificios oficiales. Que no los quito. El edificio es de todos. El edificio es mío, se supone que ha dicho el señor Torra. Podían ponerse el lazo en la boca y así nos ahorrábamos escuchar tonterías. Lazo en la boca de Torra. Lazo en la boca de Artadi. Solo así sí podría decir que no había libertad de expresión. Con lápiz y papel, claro. Pero el resto de ciudadanos descansaríamos. Qué descanso para los oídos.

Torra tiene un gran problema. Se cree a sí mismo que es un lazo amarillo. Que es la bandera independentista. Con eso se autosatisface y el resto le da igual. Sabe que tras la sentencia del procés, y las nuevas elecciones en Cataluña, desaparecerá. Se diluirá como un azucarillo. Se supone. Porque Artur Mas pensó así de Puigdemont y miren ustedes lo que ha sucedido. Lo mismo le ocurre a Quim Torra. Se ha mirado al espejo y se ve así mismo como un tipo listo, muy listo. Y vacila al Estado y a la Junta Electoral Central (JEC). Que quite los lazos de los edificios oficiales, señor Torra. Nada. Ahí sigue con los lazos y la pancarta colgada de la fachada del Palau. Marca distancias con el Estado. Lo que diga el Defensor del Pueblo Catalán. Y ya tenemos de nuevo otro capítulo catalán. No podía olvidarse a Cataluña ante unas elecciones generales. Todo el protagonismo para Cataluña y para Torra.

Poner lazos, quitar lazos. ¿Qué pinta el defensor del Pueblo Catalán? Nada. Absolutamente nada. Torra que tiene ganas de jugar. Bien sabe que el proceso judicial tardará y que lo inhabiliten le importa un rábano. Ya está inhabilitado por los poderes independentistas catalanes. Ya hizo su papel, pues fuera. La presidencia le toca a ERC. Él no volverá a ser presidente. Pero se llevará un lazo a su casa, no para pegarlo a la fachada sino para ponérselo en la boca y que no la vuelva a abrir. Será la condición de sus poderosos jefes independentistas.

¿A que juega Torra con su insumisión? Puede que a cierta revancha contra Pedro Sánchez. Por cuando los Presupuestos y su no cesión a los independentistas todo lo que pedían. El diálogo de entonces con Torra fue un fracaso. Nunca los independentistas tuvieron intención de pactar. Torra vacilando al Estado, mientras los lazos siguen en las fachadas, no ayuda al Gobierno y menos a su presidente. Quien ha optado por ser prudente y dejar a las instituciones judiciales que actúen en el asunto. Pero la insumisión de Torra da oxígeno al PP y a Ciudadanos.

Queda claro a partir de ahora, si no estaba ya, que el PDeCAT y Pedro Sánchez no se entienden. Los diputados que consigan en la elecciones generales no apoyarán a Pedro en una próxima investidura. Por descontado. Sumar cada vez es más complicado si miramos las encuestas y vemos el caer de Podemos. ¿Sumará la banda derecha? También está difícil. Nos acercamos a otro bloqueo como en 2015 cuando Mariano Rajoy no sumaba y Pedro mantenía el “no es no”. Futuro incierto, más bien pesimista.

Muy pesimista. Porque estos ‘líderes’ políticos actuales sólo piensan en sí mismos y no en los ciudadanos. Purga en todos los partidos para poner a sus fieles y sumisos amigos. Y voces sobre Cataluña. ¿Alguien ha dicho algo sobre la crisis económica que se avecina? ¿Alguna iniciativa económica para mejorar la vida de los ciudadanos? Nada de nada. Parece que no interesa. Con Cataluña y los lazos hay bastante tema con el que predicar en la campaña electoral.

Sólo interesa sumar escaños para ser presidente. Y aquí me las den todas. Si Sánchez indulta a los condenados del procés para sumar apoyos la revuelta en el PSOE será mayor que la sufrida cuando lo expulsaron. Si le da la vicepresidencia a Iglesias la revuelta en la UE y en el mundo económico será de órdago. Y aun así, según las encuestas, no sumará los escaños necesarios. Los lazos de unión se van a dispersar. Que los dediquen todos a cazar ayudas y escaños, porque aun así serán pocos. Todos menos el de Torra. Se lo llevará a casa en la boca. De recuerdo.