Lo que es la política. Lo que es el terrorismo. Lo que es la vida misma. ¡Cómo se les ocurre a los del Estado Islámico perpetrar ese atentado en París! Pues han fastidiado a Mas. Sí, a Artur Mas, el aspirante a presidir un gobierno autonómico catalán y a presidir Cataluña. Porque esos ataques han unido a la Unión Europea. Han estrechado los lazos de los gobiernos y de los ciudadanos europeos. Hay que defender la democracia, la vida, la ley. ¡Vaya momento! Quién es, ahora, el osado que va a Bruselas a pedir apoyo para la independencia catalana. O a pedir su inclusión en la UE. Estos yihadistas es que no piensan. Le han hecho un roto en toda la espalda, señor Mas.
¡Vaya momento! Quién es, ahora, el osado que va a Bruselas a pedir apoyo para la independencia catalana. O a pedir su inclusión en la UE. Estos yihadistas es que no piensan
Además de los que ya tenía. Hechos por usted mismo, claro. Independientemente de su falta de cerebro. De su falta de talla de político de bien. De su falta de dotes de estadista. Sí, ya sabemos que otros tampoco lo son, pero eso no lo justifica. Son tan grandes sus errores que lo descalifican para seguir de president. Lo descalifican como político y como gobernante. No era necesario ser una lumbrera para ver que el adelanto electoral en Cataluña era un gran error. Fue suyo. Sus ambiciones tendría. Pero celebrarlas antes de la generales ha sido el gran error que lo manda a casa. ¡Qué error, señor Mas! ¡Inmenso error! Busque la lumbrera que le aconsejó y lléveselo a casa también. Como imponer el número de escaños en vez del número de votos. Como hacer de las elecciones autonómicas una farsa para convertirlas en plebiscitarias. Para eso existen los referéndums. Como saltarse la ley. Y lo grave es que no tiene consecuencias. Otros ciudadanos estaríamos en la trena, a la sombra. ¿Y las concesiones a la CUP? ¿Son ustedes hombres de ley? ¿De qué van? ¿Sólo les interesa el poder? ¿Para qué? Seguro que para buenas obras, no.
Si sólo les interesa el poder para sus negocios, está sobrando, señor Mas. El poder es para trabajar por el bienestar de los ciudadanos. Para administrar la sociedad. Sólo les queda rectificar y volver a la legalidad, como le aconseja La Vanguardia. Sólo les queda irse a casa. Ese matrimonio con la CUP es 'antinatura'. Entendemos que le gustaría ser investido president. Seguro que lo primero que hubiese hecho es triturar a la CUP. Seguro que los hubiera machacado sin contemplaciones. No me cabe la menor duda. Los ciudadanos ya le darán su merecido en las elecciones que usted va a adelantar otra vez. Pero sin usted, señor Mas. Deja a Cataluña hecha un solar. Y dividida. Peor todavía. Cataluña está en una situación desastrosa. Es su responsabilidad. Y, como tal, ya no tiene autoridad moral ni política para liderar la nueva etapa. Hay que rectificar. Lo desean sus compañeros. Muchos más de los que lo dicen. Ya sabemos que le hubiera gustado ser un mártir. Pero para eso también se necesita tener más altura de hombre y de ideas de las que tiene usted. Su altanería y falta de cerebro le han llevado a este fin. ¡Adiós, señor Mas! Fue un error conocerle.