"Lo normal sería primero intentarlo de acuerdo con las leyes, y si no puede ser, hacerlo igualmente. La consulta se ha de producir en cualquier caso. Si se puede hacer por la vía del referendo porque el Gobierno español lo autoriza, mejor; si el Gobierno español da la espalda y no autoriza ningún tipo de referendo o consulta, pues se ha de hacer igual".
Estas palabras son de Artur Mas, tal como aparecen recogidas en La Voz de Barcelona. (El Ara tituló ese mismo día: "Mas deja claro que se hará un referéndum aunque sea sin permiso de Madrid"). Estas palabras las pronunció Mas el 26 de septiembre 2012. Con esta posición Mas ganó las últimas elecciones autonómicas.
Esto salvará a CiU de la ruptura, de momento. Los otros dos socios de gobierno, ERC y ANC, ya deben estar afilando los cuchillos. Van a ser unas elecciones municipales muy duras para CiU, el año que viene
En los dos años posteriores a su elección, Mas se movía poco a poco hacia la posición de Duran i Lleida, citadas en el mismo artículo de La Voz de Barcelona: "Nosotros no vamos a saltarnos la ley". Pero hasta ayer, CiU y el govern dels millors no dejaban duda de que la consulta se haría, porque se adecuaría a alguna legalidad, sea la nacional, la internacional o bien la autonómica: que se harían una ley a medida, ya que la Generalidad tiene la competencia para convocarla, como ha seguido insistiendo (no, mintiendo: lean el artículo 122 del Estatuto, por favor) CiU hasta hace muy pocos días. Uno de los últimos grandes inventos de Artur Mas fue pedir al Gobierno que mirara hacia otro lado y así "facilitar" la consulta.
La consulta no se hará. El Constitucional la tumbará, y ya está. Así ayer lo dejaron claro tanto Joan Rigol como la vicepresidenta del Govern, la licenciada Joana Ortega, quién añadió descaradamente: "La legalidad ha sido siempre el valor que ha acompañado todo este proceso". Hoy, en otra entrevista radiofónica, Ortega ya ha empezado a preparar el día después: "Habrá otro 9N".
Qui dia passa, any empeny. El monotema se puede alargar hasta las próximas elecciones autonómicas en 2016, y, quién sabe, hasta entonces hay 23 asuntos que se pueden ir solucionando, a razón de uno por mes. ¿Recuerdan lo contento que Mas presentó su lista de 23 propuestas para Rajoy en rueda de prensa? Rajoy la ha pasado a sus ministros. Pues eso, "diálogo abierto". Autonomismo, no separatismo.
Esto salvará a CiU de la ruptura, de momento. Los otros dos socios de gobierno, ERC y ANC, ya deben estar afilando los cuchillos. Van a ser unas elecciones municipales muy duras para CiU, el año que viene.
Primero, un otoño caliente. Otra mani por otro fallo del TC, movilizaciones a granel. Pero, ¿contra quién va a rebelarse la ANC? ¿Contra Mas también? Será interesante ver cómo se abren nuevos frentes.
Pase lo que pase en aquella vertiente, el nacionalismo en su conjunto, el de Mas y el de los "extremistas" (Graham Watson dixit), sigue ganando. La burbuja independentista se va a deshinchar poco a poco, Cataluña no es Tahrir. Pero va a dejar una grave herencia: los contrarios a la consulta no van a ser tildados solamente de traidores. Fallo del TC en mano, se los va a tratar consistentemente de antidemocráticos. Van a ser los parias que casi ni se merecen participar en unas elecciones, y Cataluña va a tardar siglos para recuperar el seny.