Pensamiento
La Constitución y el proyecto socialista
El pasado fin de semana, Alfredo Pérez Rubalcaba y Pere Navarro, líderes del PSOE y del PSC, respectivamente, se dedicaron a ensalzar la supuesta unidad de los socialistas catalanes con los del resto de España y se deshacían en elogios hacia la Constitución, incluso llegando a pregonar su contenido en materia de cohesión territorial, en libertades y en justicia social que, por supuesto, deberían ser ampliadas en una hipotética reforma.
Además, defendieron su propuesta federal que, con la frontal oposición del PP y de los nacionalismos periféricos, me parece un brindis al sol, aparte de que no se pueden mezclar, en plan igualitarios, realidades tan diferentes como, sin ir más lejos, Murcia o La Rioja con Euskadi o Cataluña porque, "lo que no pue sé, no pue sé y además es imposible", como diría "er Guerra", torero, que no Alfonso, ex vicepresidente del Gobierno con Felipe González.
Los socialistas hemos de lamentar la traición perpetrada desde el PSC contra miles y miles de sus militantes, contra cientos de millares de sus votantes
Instaba Rubalcaba al PSC a "celebrar con orgullo" el Día de la Constitución, "con orgullo por el trabajo bien hecho...", porque "tenemos que celebrarla" y también porque "somos un país muchísimo mejor que hace 35 años", con orgullo "tenemos que celebrar este día". Con esta contundencia, añadía que, con la Constitución, Cataluña ha tenido "una etapa de libertad, progreso, convivencia y autogobierno como nunca conocimos en nuestra historia" y, decía a Navarro: "Gracias, Pere, por tu trabajo, tu tenacidad y tus ideas. [...] Desde el PSOE sentimos por el PSC cariño, afecto y respeto a cómo sois. Os queremos como sois". Así lo señaló, según recoge CRÓNICA GLOBAL.
En cuanto a Navarro, este nos declaraba que su amor a la Constitución "es porque la quiero" y por eso "creo que se ha de cambiar, se ha de adaptar a la actualidad y a la sociedad en la que vivimos", afirmando a continuación que con el PSC no podrán porque "tenemos un proyecto para Cataluña, España y Europa" y que tanto PSOE como PSC defienden "lo mismo".
Después de ese esperanzador cierre de la semana federalista que han protagonizado Rubalcaba y Navarro, todo parecía indicar que la plataforma Som Catalunya. Somos España, de la que Ágora Socialista forma parte, podría contar con la asistencia del PSC a la manifestación que, con el lema "¡Juntos! Per un futur democràtic i plural", se ha convocado para el próximo 6 de diciembre en conmemoración de la Constitución de todos los españoles.
Pero, una vez más, los socialistas hemos de lamentar la traición perpetrada desde el PSC contra miles y miles de sus militantes, contra cientos de millares de sus votantes y contra el proyecto socialista, tras las inmorales declaraciones de su portavoz Jaume Collboni, quien ha tenido la poca dignidad política de adjetivar como "frentismo" lo que no es sino un acto radicalmente democrático como es la celebración unitaria y no partidista de la aprobación de la Constitución. Eso sí, Collboni, a quien me niego a considerar compañero, en una más de sus muestras de prepotencia y cinismo, se permite concedernos la libertad de asistir "a título personal", aunque a renglón seguido insiste en sus despropósitos dejando caer que quienes apoyamos la celebración festiva y pacífica de nuestra Carta Magna alimentamos "bajas pasiones" cuando el frentismo y las bajas pasiones las vienen alimentando desde siempre los partidos nacionalistas y sus amigotes infiltrados en las fuerzas de izquierda.
No sólo debería tomar nota Navarro, antes de la definitiva desaparición a la que el PSC parece abocado, sino también el PSOE y Rubalcaba
Así las cosas, lo menos que podemos hacer es exigir que tanto el PSOE como el PSC se reafirmen en esa defensa de la cohesión territorial, en esa unidad de proyecto que nos han explicado y en ese amor a la Constitución lo cual debería acarrear el cese inmediato de Jaume Collboni de todas sus responsabilidades en el PSC porque de lo contrario, este personaje, salido de no se sabe dónde, con descalificaciones tan impresentables en democracia, se ha cargado en unos minutos la credibilidad de las dos organizaciones socialistas y la de sus principales dirigentes.
Todo esto me lleva a recordar lo que siempre hemos denunciado las gentes de Ágora Socialista: que el PSC hace tiempo que abandonó el proyecto nacido con la unidad de los socialistas en Cataluña hace 35 años y que cada vez que se plantea el superar la degeneración de ese proyecto, el intento queda malogrado por la acción de las minorías nacionalistas que desde hace muchos años se han empeñado, desde dentro, en la desaparición de las fuerzas de izquierda catalanas para ponerlas al servicio de las trescientas familias de siempre, constituidas en el actual régimen de cuasi partido único.
Y de lo anteriormente escrito no sólo debería tomar nota Navarro, antes de la definitiva desaparición a la que el PSC parece abocado, sino también el PSOE y Rubalcaba porque si seguimos así, durante muchos años, el socialismo no volverá a ganar unas elecciones en Cataluña lo que también significaría que la izquierda tampoco podrá desalojar a la derecha del Gobierno de España y que, en evitación de esa catástrofe, desde Ágora Socialista apoyaremos la manifestación en defensa de la Constitución y seguiremos trabajando por un proyecto auténticamente socialista sin contaminación identitaria.