Pensamiento
Junqueras pierde la calma
Las declaraciones de Oriol Junqueras en Bruselas amenazando con un huelga general que arruine la economía catalana y española son un gravisimo error estrátegico fruto sin duda de una creciente ansiedad y nerviosismo. Los indicios cada vez más evidentes de que la tercera vía defendida por Duran i Lleida y los socialistas va abriéndose camino, aunque sea a trancas y barrancas, ha hecho perder a Junqueras una flema que hasta ahora le había permitido ir recogiendo votos sin necesidad de mojarse.
Seguro que en las filas de la federación nacionalista, sobre todo en UDC, las palabras del líder republicano habrán sido acogidas con alegría
Junqueras habia enseñado hasta ahora su cara amable. Pero las declaraciones de este miércoles le enfrentan no con "España" sino con muchos catalanes sentimentalmente independentistas pero que no están por la labor de destruir nada. Y menos su propia riqueza. Bastante se ha sufrido con la crisis económica como para que ahora venga un "revolucionario" para acabar de rematar la faena.
Las declaraciones de Junqueras detendrán sin duda la sangría de votos de CiU. Por ello, seguro que en las filas de la federación nacionalista, sobre todo en Unió, las palabras del líder republicano habrán sido acogidas con alegría. Pero también debilitan al movimiento independentista en su conjunto.
Hasta ahora se nos había vendido una independencia indolora. Solo ventajas. Ningún problema. Ahora resulta que no sólo el puerto de llegada nos dejaría fuera de la UE, sino que el trayecto será tormentoso y con daños económicos graves. No parece una buena táctica y, desde luego, rompe con la mantenida hasta ahora.
En fin, entramos en una nueva fase del llamado proceso soberanista. La alianza CiU-ERC queda muy tocada. No veo a CiU secundando una huelga para arruinar a sus votantes. Supongo que Junqueras matizará sus palabras o, como el ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, alegará malentendidos. Pero Junqueras ya ha enseñado una patita nada tranquilizadora para la burguesía catalana y las clases medias.