Stephen Hawking era un “enamorado” de Asturias. El principado conquistó en 2005 al físico británico, quien se llegó a declarar "enamorado" de esa región española, donde participó en los actos de inauguración del XXV aniversario de los premios Príncipe de Asturias.
En aquel momento, Hawking dio una conferencia titulada "Retrocediendo en la historia", en la que revisó su pensamiento filosófico e intelectual. Pero la visita no fue solo académica, también dejó tiempo libre en su agenda para visitar algunos de los lugares más representativos de Asturias, como su capital, Oviedo, y Gijón.
La ‘magnificent’ catedral de Oviedo
En Gijón disfrutó del sol en la playa de San Lorenzo y visitó el yacimiento arqueológico de las Termas Romanas de Campo Valdés, uno de los principales testimonios de la romanización del norte de España.
Stephen Hawking durante un recorrido en Asturias
La imponente catedral de Oviedo le impresionó y la calificó de “magnificent” (grandiosa) durante un recorrido en el que visitó también las calles del centro de la capital, la Universidad, y se detuvo ante la estatua del cineasta Woody Allen. En esa ciudad, Hawking presentó mundialmente su libro "Brevísima historia del tiempo".
Numerosas visitas a España
El científico había estado ya en Asturias en 1989, cuando recogió el Premio Príncipe de Asturias a la Concordia. Con anterioridad había estado en España, en 1987 y en 1988.
Hawking en la entrega de los premios Príncipe de Asturias en 2005
En 2005, cuando regresó, quiso dejar constancia de su agradecimiento en una carta al director de la Fundación Príncipe de Asturias, Graciano García, en la que aseguraba que disfrutó mucho de la visita y que fue un "gran placer" volver a ver a Don Felipe, el actual Rey de España, entonces príncipe de Asturias.