Carla Simón ha hecho historia y se ha convertido en la primera directora española en ganar un Oso de oro en el festival de Berlín por su película Alcarràs.
Desde la proyección del film el pasado lunes, la cineasta conquistó a los espectadores de la Berlinale y varios medios internacionales pedían ya el máximo galardón para la catalana. Una petición que se ha convertido en real.
Premio histórico
Pese a no ser la primera española en alzarse con la preciada estatuilla a la mejor película del festival --antes lo hicieron Emilio Martínez Lázaro (Las palabras de Max), José Luis García Sánchez (Las truchas), y Mario Camus (La colmena)--, sí es la primera mujer directora patria en llevárselo.
No es la primera vez que la Simón participa en el certamen. Lo hizo con su anterior película, su ópera prima Estiu 1993, pero no fue a competición. Ella misma confesaba meses a Crónica Global que no sabía cómo iba a ser recibida esta segunda película suya, ni tan sólos sabía si iba a ser seleccionada para ningún festival. La noticia ha sido todo una alegría para la joven realizador.
'Alcarràs'
La película, una vez más retrata una historia personal. Esta vez no se basa tanto en su vida, pero sí en la historia de su familia. "Es una historia de mi familia, pero de la que no tengo un conocimiento muy profundo, y tuve que hacer un proceso de investigación", señalaba a este medio. La pandemia tampoco ayudó y es que si no fuera por las consecuencias del Covid, ya se hubiera estrenado en salas españolas.
La cinta narra los conflictos que no se ven del mundo rural y en concreto en el municipio leridano que le da nombre. Retrata el último verano de una familia dedicada a la recogida del melocotón en esa población catalana. No habrá otra cosecha, ya que el propietario de las tierras que cultivaron durante décadas, por contrato verbal, las dedicará ahora a otro negocio más lucrativo: las placas de energía solar.
Agradecida
Alcarràs, que se estrenará en las salas de cine en primavera, está protagonizada por actores no profesionales de Lleida y trabajadores del campo. El reparto lo forman Jordi Pujol Dolcet, Anna Otín, Xenia Roset, Albert Bosch, Ainet Jounou, Josep Abad, Montse Oró, Carles Cabós y Berta Pipó, entre otros, unas personas que se han convertido en "una nueva familia", detalla. Ya a es este medio recordaba que "fue muy complejo escribir el guion" y que era "muy compleja" de hacer. El trabajo ha tenido ya su recompensa.
La realizadora no puede estar más feliz tras la noticia. En su discurso al recoger el premio, ha asegurado que se considera, textualmente, una hija de la Berlinale: "Deberíamos venir a vivir aquí porque siempre que venimos pasa una cosa fantástica" y ha agradecido a los intérpretes, especialmente a los que actuaban por primera vez, y a su familia que cultiva melocotones en Alcarràs: "Es gracias a ellos y a mi proximidad con este mundo que he podido explicar esta historia". Por último, ha dedicado el Oso de oro a las pequeñas familias de agricultores que practican una labor respetuosa porque "es una forma de resistencia".
Jurado
El jurado de la sección oficial está formado por M. Night Shaymalan, Karim Aïnouz, Saïd Ben Saïd, Anne Zohra Berrached, Tsitsi Dangarembga, Ryusuke Hamaguchi y Connie Nielsen. El director del El sexto sentido y presidente del jurado ha explicado que el premio se ha otorgado "por sus extraordinarias interpretaciones, de actores infantiles hasta actores de 80 años, por su capacidad de mostrar la ternura y la comedia de la familia, y el retrato de la dependencia de la tierra".
Menos suerte han tenido el otro director catalán que participó en la Berlinale, Isaki Lacuesta, que se ha ido de vacío pese a los aplausos que se llevó Un año, una noche, un film basado en el testimonio de una persona que vivió el atentado de la sala Bataclán de París.