Y ya con esta van cinco. Se estrena la quinta temporada de la serie The Good Fight protagonizada por Christine Baranski. Un avance que primero se verá en la plataforma Paramount+ y más tarde en Movistar+. Una llegada que se ha hecho de rogar por lo que ya se sabe de cómo ha afectado la pandemia a todo, producciones audiovisuales y culturales inclusive.
Vuelve, para los más fanáticos, la conocida serie de abogados que ya sufrió los estragos de la crisis sanitaria con la temporada 4. En aquel momento se tuvo que acortar la entrega y estrenar menos capítulos de los que se habían planteado en un primer momento. Así fue como se quedaron en el aire algunas tramas, que posiblemente se retomarán en esta nueva temporada, relacionadas con los personajes interpretados por Cush Jumbo y Delroy Lindo.
El comienzo
En febrero de hace 4 años comenzaban a emitirse los primeros episodios de la primera temporada (con un total de diez) con el protagonismo absoluto de Christine Baranski en el papel de Diane Lockhart. Precisamente, no se trataba de un nuevo personaje que surgiera del guion, sino que ya aparecía en la seria matriz de esta otra producción, The Good Wife.
Todo comienza cuando Diane se ve obligada a abandonar el bufete Lockhart, Decker, Gussman, Lee, Lyman, Gilbert-Lurie, Kagan, Tannebaum, & Associates después de un escándalo financiero. Un sórdido tema que hace que su reputación caiga por los suelos y con ello, también su dinero. Se queda prácticamente arruinada. Es entonces cuando empieza a formar parte de un nuevo despacho jurídico en el que ya trabaja Lucca Quinn (interpretado por Cush Jumbo).
Sinopsis
Ya circulan por la red algunas escenas de lo que será esta nueva temporada. Una nueva oportunidad para ver a la abogada Diane Lockhart que, en este caso, se verá forzada a preguntarse a sí misma si su puesto dentro de una firma de abogados afroamericana es todo lo correcta que debería; sobre todo si se tiene en cuenta cómo es su actitud y actuación cuando se trata de poner sobre la mesa temas de derechos civiles.
El preludio es la cuarta temporada en la que se pudo ver cómo se producían las dimisiones de Lucca y Adrian, una trama que ahora dará paso a un nuevo personaje (interpretado por Mandy Patinkin) que formará parte del elenco de estas nuevas escenas. Suyo será el papel de Hal Wackner, quien decide abrir su propio tribunal pero en un lugar cuanto menos curioso, la parte de atrás de una tienda de fotocopias. Pero este no será el único nombre nuevo en estos 10 próximos capítulos ya que también formarán parte del reparto Audra McDonald y Sarah Steele.
Vuelta a los juzgados
Todo esto ocurrirá a partir del 24 junio cuando comience la nueva temporada de The Good Fight. Una serie que empezó de una manera curiosa. La idea era dar forma a una especie de spin-off de la otra gran serie ya mencionada como era The Good Wife, justo en el momento en que se produjo el nombramiento de Donald J. Trump como presidente de los Estados Unidos.
Era, por tanto, el instante ideal para dar vida a esta serie que se desarrolla en los juzgados y donde tendría cabida todo tipo de nuevos retos en el mundo de la política y en los tribunales. Precisamente, buena parte de su éxito como serie (además de por la interpretación de su protagonista) es por el atrevimiento que supuso para la sociedad norteamericana esta producción que era toda una radiografía mordaz de lo que era el siglo XXI y lo que sucedía en el país.
Toda una revelación
Todo, o prácticamente todo, lo que ha ocurrido en Estados Unidos desde el momento histórico antes apuntado se ha reflejado en esta serie creada por Robert King, Michelle King y Phil Alden Robinson. The Good Fight ha servido a lo largo de sus cuatro temporadas, y seguirá así en la que se estrena próximamente, para poner en imagen temas tan candentes y de actualidad como el ascenso de los partidos de ultraderecha, el movimiento #MeToo o hasta la figura del magnate Jeffrey Epstein (ya fallecido) condenado por tráfico de menores.
Todo un mundo lleno de secretos y mentiras al que se enfrentan cada día Diane Lockhart y su equipo de abogados que llevan en la sangre el defender la parte más justa de sus causas, aunque a veces se topen con jueces no muy imparciales; sobre todo aquellas que tienen que ver con temas de conflictos raciales o de desigualdad de género.