Un año y medio después de que se acabara la serie Juego de Tronos, aún sigue siendo de las más recordadas y seguidas en todo el mundo e incluso cuenta con fans que todavía reniegan del final que le dieron los guionistas.
Pero si por algo se puede recordar en la actualidad es por las excelentes frases que en ella se pronunciaron, muchas de las cuales llegaban directamente desde las páginas de los libros escritos por George R.R. Martin. En este sentido, todo el mundo recuerda “Se acerca el Invierno”, “Un Lannister siempre paga sus deudas”. “Valar Morghulis”, “Dracarys” e incluso “Hodor”. Sin embargo, hay muchas más.
Juegos de poder
Juego de Tronos muestra una lucha constante por el poder, sin importar cuáles son los medios para alcanzarlo. De ahí que muchas cosas que se dicen en la serie bien podrían aplicarse a situaciones políticas muy actuales, tanto en España como en otros países. Y es que, como bien apunta Cersei Lannister, “Cuando juegas al juego de tronos, o ganas o mueres. No hay término medio”.
Así pues, apuntamos algunas de las citas más demoledoras de algunos personajes que están relacionadas con este tema y que, por suerte o por desgracia, se podrían utilizar hoy en día.
Madre de dragones
Uno de los personajes más carismáticos e importantes de la trama es Daenerys, la dueña de los tres dragones sobre los que sustenta su poderío militar. La última Targaryen aprende poco a poco el oficio de gobernar y deja perlas como las siguientes:
- Por un lado, se da cuenta de que incluso los regímenes más autoritarios terminan consiguiendo la aprobación de muchos ciudadanos: “La gente aprende a amar sus cadenas”.
- Por otro, se percata de que tiene que ha de contar siempre con los apoyos adecuados: “Una reina que no confía en nadie es tan tonta como una reina que confía en todo el mundo”.
- Y además aprende el arte de la paciencia: “Las serpientes enfadadas atacan. Eso hace más fácil aplastar sus cabezas”.
El enano
Si hay un compendio de sabiduría en la serie, ese es el cerebro de Tyrion Lannister, el pequeño gran protagonista que cuenta con una inteligencia tan aguda como cínica. No en vano asegura que “La mente necesita libros como la espada necesita una piedra de afilar si quiere mantener su agudeza”. Otras grandes frases son:
- “Si le cortas la lengua a un hombre no demuestras que estuviera mintiendo, sino que no quieres que el mundo escuche lo que quiere decir”, o lo que es lo mismo, hay ciertas censuras que no buscan silenciar las mentiras, sino puntos de vista diferentes.
- “Por qué será que en cuanto un hombre construye un muro, su vecino inmediatamente quiere saber qué hay del otro lado”, que habla por sí sola.
- “La verdadera historia del mundo es la historia de grandes conversaciones en salones elegantes”, o lo que es lo mismo, los juegos de poder se llevan a cabo en palacios y entre gente influyente. Ni más, ni menos.
Lecciones de los Stark
Juego de Tronos esboza lecciones de vida que pueden utilizarse tanto en el terreno político como en cualquier otro entorno y que resulta interesante señalar. Por ejemplo, Sansa Stark recuerda que en los peores momentos, hay que estar unidos: "Cuando cae la nieve y los vientos blancos soplan, el lobo solitario muere, pero la manada sobrevive".
Asimismo, su hermanastro Jon Nieve, hace referencia a que, en ocasiones, hay que optar por el mal menor: “A veces no hay una opción feliz, solo una menos grave que las otras”; a lo que añade que no todos los puntos de vista tienen por qué ser iguales: “Miramos las mismas estrellas y vemos cosas diferentes”.
El miedo y el caos
Por supuesto, hay personajes menos idealistas que Ned Stark --"El hombre que dicta la condena debe blandir la espada"-- y sus descendientes. En este sentido, la citada Cersei tiene muy claro que el miedo es la mejor arma de los gobernantes: "La única forma de que te sean leal es inspirando más temor que tu enemigo”. No extraña demasiado cuando las enseñanzas de su padre eran que "El león no se molesta con las opiniones de las ovejas".
Aunque si hay alguien que sabe cómo medrar en los momentos más complicados ese es Petyr Baelish, más conocido como Meñique, quien demuestra algo que diversos políticos ponen en práctica a la perfección: “El caos no es un pozo, es una escalera”, es decir, cuanto más embarulladas estén las cosas, mejor para quienes tengan claros su objetivos de gobernar a cualquier precio. Además, Meñique tiene muy claro que “No importa lo que queramos, una vez que lo obtenemos, luego queremos algo más”.
La voz del pueblo
Por supuesto, en Juego de Tronos también hay espacio para consideraciones más terrenales que la de manejar el poder. Tal y como apunta Jorah Mormont: “El pueblo llano, cuando reza, pide lluvia, hijos sanos y un verano que no acabe jamás. No les importa que los grandes señores jueguen a su juego de tronos, mientras a ellos los dejen en paz. Pero nunca los dejan en paz”.
El gran defensor de Daenerys también aprendió a que no todo era blanco o negro, rojo o azul, morado o verde… cuando asegura que “Es tentador ver a tus enemigos como malvados, pero hay bien y mal en ambos lados de cada guerra que se haya peleado”. Lo que sí parece que queda cristalino a lo largo de la serie es una de las quejas de Jon Nieve: “Cuanto más le das a un rey, más quiere".