La teniente de alcalde de Ecología Urbana de Barcelona, Janet Sanz, es junto al responsable municipal de Cultura, Joan Subirats, una de las figuras que más apuestan por vetar el proyecto de Museo Hermitage en el Puerto de la Ciudad Condal.

Sanz debería escuchar la experiencia de pinacotecas similares, como la de Ámsterdam, que lleva 10 años cosechando éxitos y está consolidada. Sobre todo por cuanto los informes negativos emitidos por el Ayuntamiento de Barcelona eran claramente de parte.