En la comarca del Alt Empordà, en la provincia de Girona, destacan muchos municipios por su gran atractivo turístico. Uno de ellos es Peralada, una localidad situada a apenas 25 kilómetros de la frontera con Francia.
El municipio es ampliamente conocido en la zona por su castillo, una fortificación que recibe miles de visitas anuales y que cuenta con un festival de música a su nombre (ya que se celebra en sus dominios). Pero el Castillo de Peralada es el lugar más popular de la zona, no es el único punto turístico que descubrir.
Claustro románico de Sant Domènec
El claustro románico de Sant Domènec, del siglo XII, es el único testimonio que se conserva de un antiguo monasterio de agustinos fundado en la segunda mitad del siglo XI. Extinguida la comunidad primitiva, en 1578 fue adquirido por la orden de Santo Domingo, de donde proviene su nombre actual. Los capiteles y las columnas pertenecen al claustro del primitivo monasterio románico, pero el edificio es del siglo XVI.
Claustro románico de Sant Domènec / AJUNTAMENT DE PERALADA
Los capiteles son de una temática rica y diversa que combina motivos vegetales y geométricos con figuras zoológicas, entre los que destacan el de Adán y Eva, el de los Atlantes, el de la caza, el del banquete y el de los pecados originales. El 1835, a raíz de la desamortización, pasó a manos del Ayuntamiento de Peralada y desde entonces ha tenido muchas funciones: hospital, juzgado, cuartel e incluso ha albergado un cine.
Convento del Carmen
Edificio gótico en el que destacan su claustro y su iglesia, conserva un excepcional artesonado de madera policromada. Dentro del antiguo Convento del Carmen se encuentra una de las colecciones privadas más espectaculares de Cataluña: la biblioteca, con cerca de 80.000 volúmenes y más de 1.000 ediciones de El Quijote, es uno de los grandes atractivos de este lugar.
Ejemplares de 'El Quijote' en la Biblioteca del Castillo de Peralada / AJUNTAMENT DE PERALADA
También destacan el Museo del Vidrio, en el que se puede ver una amplia selección de vidrio catalán y numerosas representaciones de vidrio de todas las épocas; y el Museo del Vino, que se creó en los años 60 en la cava en la que hasta entonces se elaboraban los vinos de Peralada.
Parque del castillo
Accediendo por el mismo Convento del Carmen se puede visitar el Parque histórico del Castillo de Peralada, diseñado por François Duvillers en el año 1877 por encargo de los condes de Peralada. En 1875 los condes de Rocabertí reformaron el castillo medieval militar en un château a la moda francesa. Junto al nuevo palacio decidieron construir un parque, contando con unos terrenos adyacentes conocidos como lo Bosch del Comte.
Durante el recorrido los visitantes se encontrarán con una colonia de cigüeña blanca, un jardín francés de rosas, tejos, magnolias, pinos, cipreses y una encina de más de doscientos años, anterior al parque. También podrán ver el aviario del siglo XIX, habitado por faisanes y palomas de diferentes especies y una gruta construida en el 1877.
Bodegas Castell de Peralada
La elaboración de vino en Peralada está documentada ya desde la Edad Media, tal y como lo atestiguan varios documentos y pergaminos de la época que se conservan en la biblioteca. Cuando Miguel Mateu compró este conjunto monumental en 1923 uno de sus principales objetivos fue la revitalización de esta tradición vitivinícola, una tradición que hoy se encuentra más viva que nunca y que ha incorporado la más moderna tecnología para elaborar unos vinos que sacan el máximo partido de los matices de los suelos y viñedos del Empordà.
Existen diferentes opciones de visita a las Bodegas Castell de Peralada, que permiten conocer todos los secretos de la elaboración del vino. Desde las viñas de malaveïna, una de las cinco fincas que Castillo Perelada tiene en el lugar, hasta la sala con 5.500 barricas o la histórica cava del Gran Claustro, donde se elabora vino desde la Edad Media.
Vilanova de la Muga
El núcleo de Vilanova de la Muga pertenece a Peralada. Este municipio de unos 250 habitantes está muy cerca del río de la Muga y forma parte de las Marismas del Empordà. Es recomendable caminar por sus calles y visitar su iglesia románica de Santa Eulàlia, que data del siglo XI y en la que pueden verse unas pinturas murales de gran valor. Además, también es posible visitar la resclosa del Comte, una esclusa que data del siglo XVII.