Detalle del Sant Jordi gitano WIKIPEDIA
El Sant Jordi gitano, la historia silenciada de un héroe de bronce: una obra de un conocido genio modernista
El patrón de Cataluña aparecen su caballo y sin armadura, desnudo, en un importante edificio de la ciudad
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Sant Jordi es a Cataluña lo mismo que San Isidro a Madrid o La Macarena a Sevilla. Más allá de la fiesta del libro y la rosa, la leyenda de este santo que salvó a una princesa y a un pueblo de un temido dragón.
Su representación está casi por todos lados. La imagen de un caballero con su armadura y su lanza, encima de un caballo, con el escudo de Cataluña en la otra mano y matando a un dragón, es mítica. Aunque no todos lo mostraron así.
Cabe recordar que de Cataluña salieron vanguardias como el modernismo o que Picasso formó aquí su carácter y su pincel de la que saldrían obras icónicas del cubismo. Pero hubo mucho más.
Entre los artistas catalanes de esa época, destacó un escultor nacido en el siglo XIX, pero que se supo amoldar perfectamente a las vanguardias. Es más, algunos de los arquitectos modernistas contaron con él a la hora de construir su edificio. Y sus piezas daban caché.
El Rodin catalán
Hablamos de Josep Llimona i Bruguera. Sin duda alguna, este nombre fue una de las figuras centrales de la escultura catalana de finales del siglo XIX y principios del XX. Y así lo es hasta hoy, que muchos lo califican como el Rodin catalán, comparación que no le es necesaria.
Llimona no necesitaba presentación. Sus esculturas hablaban por él, como o hacen ahora. A pesar de todo, siempre hay y hubo quien no aceptaba su modernidad. Y es que si bien fue bastante academicista cuando acabó sus estudios en La Llotja, luego aposto por el simbolismo y el modernismo.
Dónde está
Su manera de hacer no se ajustaba a los moldes y su visión de Sant Jordi da buena fe de ello. Concebido como parte de un encargo institucional para dotar de una presencia simbólica y representativa al espacio central de la Casa de la Ciutat, el escultor creó una pieza única y polémica.
Realizada en 1916, la pieza ocupa un lugar destacado en la Escalera de Honor del edificio consistorial desde 1929, donde comparte protagonismo con otras figuras alegóricas del arte catalán. Aunque creó desagrado en algún momento.
El Sant Jordi Gitano de Josep Llimona WIKIPEDIA
Un Sant Jordi particular
El Sant Jordi de Llimona responde a una interpretación inusual del patrón de Cataluña. En lugar de representarlo a caballo o en combate contra el dragón, está completamente estático, solemne y silencioso.
Como un David griego, el santo aparece de pie, en actitud vigilante, desnudo y con una espada vertical sostenida con ambas manos. Su rostro es sereno y su vista, al frente.
Cómo es la estatua
El cuerpo está ligeramente girado, con una pierna adelantada que introduce un leve dinamismo. Aparece sin ningún atuendo, ni coraza ni capa que el cuerpo y sin gestos exagerados. Todo ello tallado en bronce y con una altura superior al tamaño natural.
En el diseño de esta figura, Llimona se mantuvo alejado del lenguaje decorativo y orgánico del modernismo floral que caracterizaba muchas de sus obras anteriores. Aquí prevalece una contención formal que ha llevado a algunos estudiosos a señalar una influencia del noucentismo incipiente en el escultor.
Polémica durante la guerra
La fuente que para algunos causó polémica es el modelo. Algunos investigadores señalan que el Sant Jordi de Llimona es un joven gitano del entorno barcelonés, conocido por su complexión atlética. Una teoría que le hizo ganarse el nombre popular de Sant Jordi Gitano.
La desnudez, el modelo, la santidad y la catalanidad, en cambio, molestó a algunos. Para empezar, durante la Guerra Civil se rebautizó como El Jove Heroi, el joven héroe. No por su simbolismo, sino para evitar su destrucción en un periodo marcado por la iconoclasia de los sectores anticlericales. Jordi.
Lo curioso es que la figura no está vinculada directamente con el santoral litúrgico ni con las celebraciones de la diada de Sant Jordi. Su función es simbólica en el marco del discurso institucional del edificio en el que se halla, el Ayuntamiento de Barcelona.