La cirugía de cataratas es una de las intervenciones quirúrgicas más comunes del mundo. Se realizan cada año más de 22 millones de operaciones. Una cifra que seguirá creciendo debido al aumento de la esperanza de vida.
Se trata de una afectación en la que los rayos ultravioleta actúan sobre los tejidos oculares, degradando el cristalino, que pierde la estructura y la transparencia e impide la visión.
Sonda ultrasónica
El Instituto Oftalmológico Quirónsalud Dexeus, ubicado en el Hospital Universitari Dexeus, cuenta con una de las técnicas más seguras y precisas de la oftalmología moderna y el tratamiento definitivo de las cataratas, la facoemulsificación. Consiste en una sonda ultrasónica que, a través de una cánula, transmite ultrasonidos, aspira las microparticulas, dejando únicamente la cápsula del cristalino, preparada para implantar la lente intraocular.
Evita la inflamación de la córnea
La técnica utiliza ultrasonido micro pulsado frío: "Este avance tecnológico reduce el traumatismo quirúrgico y permite realizar la técnica microincisional, MICS bimanual, mucho más efectiva y segura que las técnicas convencionales de facoemulsificación" explica el doctor Carlos Vergés, jefe de la Unidad de Cirugía de cataratas y director médico del Instituto Oftalmológico Quirónsalud Dexeus.
Esta cirugía se puede realizar por incisiones inferiores a un milímetro que no necesitan sutura para su cierre. Asimismo, mediante el micro pulsado frío, se reduce la inflamación intraocular, mejorando la eficacia y la seguridad. "Esta tecnología nos permite intervenir ambos ojos en la misma sesión e implantar lentes intraoculares, para que el paciente pueda prescindir de las gafas y recuperar la visión casi de inmediato tras la cirugía, especialmente en los casos de lentes multifocales trifocales", señala el colegiado.
Intervención simultánea
Hasta ahora la cirugía de cataratas se realiza en los dos ojos pero dos intervenciones diferentes separadas con una o dos semanas entre cada ojo. Esto supone, según Vergés, esperar un mínimo de un mes y dos procesos de recuperación y de adaptación neurológica hasta recuperar y adaptar la visión de los dos ojos.
"Gracias a esta técnica que permite una rápida recuperación, conseguimos operar las cataratas de los ojos en el mismo acto quirúrgico de forma que el cerebro se adapta mejor a la visión que le proporcionan las lentes intraoculares que hemos introducido" explica el oftalmólogo.
Más eficacia y seguridad
La otra ventaja evidente es que el paciente sólo debe pasar una vez por el quirófano: "Operamos primero un ojo en condiciones totalmente asépticas y al acabar se cambia todo el instrumental y el vestuario y guantes del personal de quirófano y se realiza la intervención del segundo ojo. De esta manera evitamos posibles infecciones", añade Vergés.
La parte más compleja de la doble intervención es realizar los cálculos optométricos de las lentes intraoculares, especialmente cuando se trata de lentes multifocales, que se introducen en cada ojo de forma que se consiga la mejor visión posible al salir del quirófano.
Síntomas principales
Al principio las cataratas son muy reducidas, por lo que no alteran casi la visión. Poco a poco van en aumento y el enfoque se vuelve borroso u opaco como si se estuviera mirando a través de un vidrio translúcido.
Otro síntoma común es la sensibilidad hacia la luz, que se nota más deslumbrante, y la poca visibilidad en entornos oscuros. En cambio, la apreciación de los colores se pierde un poco a medida que avanzan las cataratas.
Factores de riesgo
El doctor Vergés aconseja realizar revisiones periódicas de la vista y acudir al oftalmólogo si se identifican los primeros síntomas.
Los principales factores de riesgo asociados a esta dolencia son:
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Edad avanzada
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Antecedentes familiares
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Excesiva exposición a los rayos ultravioletas
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Diabetes
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Hipertensión
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Obesidad
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Tabaquismo
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El uso prolongado de determinados medicamentos
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Antecedentes de lesiones oculares o cirugía
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Consumo excesivo de alcohol