La nueva producción de la papelería del futuro
La empresa Hamelin Brands abraza el 4.0 para la fabricación del material escolar y de oficina
10 enero, 2020 00:00Hamelin es un negocio familiar de origen francés que actualmente lidera el mercado en el campo de productos para la escuela y la oficina. En el año 1993, el grupo comenzó a operar en el mercado español con la adquisición de la empresa nacional Enri 2000, fundada en 1939 y perteneciente al Grupo Torras. Tras la transacción de la antigua empresa, con sede en Girona, pasó a llamarse Hamelin Brands y a integrarse en una red de 17 plantas productivas repartidas en nueve países.
Con 94 empleados en Iberia, Hamelin fabrica y comercializa libretas, cuadernos, blocs, agendas y productos de archivo bajo las marcas Oxford, Enri, Elba, Gio, Fade y Unilux . Durante muchos años, la empresa también estuvo presente en el mundo de las licencias, ofreciendo cada año colecciones de papelería bajo la marca Enri y distintas licencias del mundo de la animación infantil, el mundo editorial, el campo de la ilustración, así como de marcas deportivas y de moda.
Una de las claves de su éxito fue la incorporación en su portafolio de Oxford, en 2002, que progresivamente fue convirtiéndose en la marca de más notoriedad y relevancia de este sector, tanto en España como en Portugal.
Fabricantes de cuadernos de espiral y recambios
El director de producción de Hamelin Brands, Ricard Pujol, recuerda que la adquisición de la empresa por parte del grupo supuso un cambio completo de paradigma: “Esta era una empresa ligada al papel, que tuvo que adaptarse a las nuevos métodos de trabajo que conllevaba la actividad que empezamos a desarrollar. De este modo, nos especializamos en la fabricación y producción de libretas de espiral, en especial, las libretas con secciones de color, que fabricamos en esta planta, para todo el grupo, y recambios de hojas sueltas para archivar en carpetas.”
Pujol explica que todas las plantas empezaron a hacer producciones específicas , lo que permitió que cada una fabricara los productos de volumen de su mercado natural. "Asimismo las plantas se dedican a productos singulares, que se fabrican en una factoría para el resto de subsidiarias, aparte del mercado propio", agrega el directivo.
Las nuevas dinámicas también derivaron en una mayor conciencia sobre sostenibilidad y medioambiente, así como en relación a la seguridad en el trabajo. “La compañía hizo una gran inversión para implementar todos estos cambios” añade Pujol.
Diseño ecológico, enfoque sostenible
Por un lado, invirtió para dar un enfoque más sostenible a sus libretas: “El Eco-design nos hizo reconsiderar el ciclo de vida completo de nuestros productos desde el aprovisionamiento de las materias primas, la fabricación del papel, la manipulación y el transporte, hasta el final del ciclo de vida del producto”. Asimismo, la empresa cuenta con un equipo de expertos para analizar las principales fuentes del impacto medioambiental.
Para ello, Hamelin trabaja desde una perspectiva científica a través de unas guías de ciclo de vida del producto que deben cumplir estrictamente con los estándares definidos. “Este trabajo nos ha permitido detectar posibles mejoras sobre el impacto medioambiental y reducir los efectos derivados de nuestros productos”, apunta Pujol.
4.0: automatizar la fábrica
Pero la inversión más importante y la que significó una mayor evolución fue la automatización de toda la cadena de producción: “Veníamos de unos procesos bastante manuales y en los últimos años hemos hecho una apuesta por tener una fábrica conectada y automatizada”, explica Pujol.
Esto se ha traducido en la implementación de tecnología 4.0 en la cadena productiva. La empresa usa un programa que se aplica directamente en la línea de producción. “Es un software que el propio grupo ha desarrollado- explica el directivo- que monitoriza y controla todos los procesos directamente en la línea de producción. De esta manera se ha incrementado notablemente la productividad de la empresa”.
Financiación para la digitalización
La incorporación de esta tecnología no habría sido posible sin la colaboración del Institut Català de Finances (ICF) que financió parte del proyecto. Pujol explica que esta inyección económica permitirá a la compañía aumentar un 20% su producción, además de implementar la tecnología 4.0 para la totalidad de los procesos de la fábrica.
El ICF cuenta con una línea de financiación para proyectos como este, con una bonificación del tipo de interés por parte de la dirección general de Industria del Departamento de Empresa de la Generalitat. “Gracias a este programa, a día de hoy hemos podido conseguir con éxito los objetivos que teníamos marcados”, explica Ricard Pujol.
Escritura tradicional y gestión digital
Para el directivo, la empresa ha de seguir orientada hacia la innovación constante, lo cual lleva a plantearse el futuro del papel. ¿Seguiremos escribiendo a mano en unos años o llegaremos a un punto que sólo lo haremos de manera digital? En este sentido, la dirección que está apuntando la empresa- explica Pujol- es hacia la viabilidad de la interacción entre la escritura tradicional y la gestión digital de las notas. “Para ello, se ha apostado por una APP propia, para las libretas de Oxford, llamada Scribzee, que permite dar poder digital a las notas manuscritas”.
La APP escanea las notas para tenerlas archivadas y organizadas en la nube, por carpetas. Esto permite acceder remotamente a lellas desde el móvil, tablet u ordenador, en cualquier momento y lugar, sin necesidad de tener la libreta a mano. “Además, se pueden realizar búsquedas entre todas las notas archivadas mediante varios filtros disponibles, compartirlas,crear recordatorios para el móvil, y también sincronizarlas con el calendario. De esta forma, todas las notas manuscritas estarán siempre disponibles en el entorno digital, aunque hayas tirado tus libretas físicas”, explica Pujol.