La resiliencia es la capacidad de hacer frente a las adversidades de la vida, es decir, superar las malas experiencias y salir fortalecidos de ellas. Con esta filosofía, en 2016 se creó el proyecto Life Clinomics, cuyo objetivo es unir a empresas y entidades agrícolas, forestales, turísticas y de la pesca para diseñar las medidas que nos permitan adaptarnos a los cambios climáticos en Cataluña y el Mediterráneo. Está previsto que la iniciativa dure hasta junio de 2019.
Coincidiendo con la 12ª edición de la Medaweek Barcelona 2018, el foro empresarial y económico que se celebrará del 21 al 23 de noviembre en la Casa Llotja, se realizará una nueva jornada del proyecto: “Promoviendo la resiliencia. Oportunidades y retos de la economía y la sociedad local en la adaptación al cambio climático”.
¿Por qué adaptarnos al cambio climático?
El cambio climático es una realidad. Se está produciendo en el mundo y se prevé que continúe. Que suba el nivel del mar a causa del derretimiento de la nieve, que las temperaturas vayan en aumento y que ocurran episodios meteorológicos que causen estragos como sequías o inundaciones, son solo algunos de los fenómenos que se esperan como consecuencia de esta realidad. Por esto, se hace necesario desarrollar estrategias de adaptación que reduzcan el riesgo de las posibles catástrofes.
También se prevé que el calentamiento global tendrá un destacado impacto en la agricultura y la temperatura. Por ello, los planes de adaptación son necesarios para garantizar el ritmo de producción de alimentos actual. Además, el estudio de los efectos del cambio climático global ayuda a prevenir y adaptar adecuadamente el sector agrícola para maximizar su producción.
La sequía es una consecuencia del cambio climático
Nuevos puestos de trabajo
Agentes económicos, políticos y sociales de los municipios catalanes aún no consideran la adaptación al cambio climático como una necesidad y una oportunidad para desarrollar la economía local. La insuficiencia de medidas de planificación e inversión que adecuarán los territorios y las actividades económicas a la nueva realidad climática fue la razón principal de la puesta en marcha del proyecto Life Clinomics, fundado por la Unión Europea. Las prioridades para el futuro inmediato han cambiado sin que las empresas hayan situado esta necesidad y hayan realizado inversiones precisas en este sector. Esto es algo que el proyecto --desarrollado por administraciones públicas, asociaciones empresariales, organizaciones sindicales y los ciudadanos-- pretende cambiar.
El plan mostrará los procesos de inversión de entidades municipales y empresas privadas de los sectores involucrados, que al anticiparse a los impactos climáticos, movilizarán distintos órganos territoriales y socioeconómicos para elaborar estudios enfocados a la adaptación. Además, diseñarán pruebas piloto para capacitar y concienciar a la sociedad. Todas estas acciones podrían aumentar las oportunidades de empleo para los habitantes de la región. A su vez, el proyecto --que tiene una duración de tres años (junio 2016-junio 2019)-- cuenta con un presupuesto de 1.392.349 euros y cuenta con una aportación comunitaria de 835.278 euros (60%).
El enoturismo en el Alt Penedès
El Consejo Comarcal de Alt Penedès trabaja con los 27 municipios de la comarca en el diseño de planes de sostenibilidad mediante el impulso del enoturismo, los servicios municipales y la mitigación del cambio climático en el lugar. Todo a través del proyecto Life Clinomics. En este sentido, la industria del vino es una de las actividades económicas primordiales de esta comarca, dominada por un patrón paisajístico de viñas, que hace que sea primordial proteger la zona.
Para ello, identifican las debilidades y fortalezas de los sectores turístico, forestal y agrícola de la zona, con el objetivo de ofrecer un diagnóstico que identifique los principales riesgos que afectan económicamente a cada sector y dar a conocer los riesgos prioritarios como el cambio en el cultivo de la viña, la pérdida de calidad paisajística y la reducción de caudales de ríos y arroyos.
La calidad paisajística del Montseny
Este parque natural es un patrimonio universal, declarado Reserva de la Biosfera por la Unesco en 1978. Se trata del parque más antiguo de Cataluña y uno de las más famosos y visitados por su abundante biodiversidad. La implementación de Life Clinomics en la zona ha permitido profundizar también en los efectos del cambio climático. Los indicadores han mostrado que los riesgos principales son el aumento de las temperaturas, la disminución de los caudales de los ríos y la duración de las zonas cubiertas de nieve, que a su vez afectan directamente a los sectores forestal, agro ganadero y turístico.
Del mismo modo, el incremento de incendios y la pérdida de la biodiversidad y de la calidad paisajística son otros problemas que el cambio climático podría generar en esta zona. La puesta en marcha del proyecto ha creado la posibilidad de abrir un debate con las diversas administraciones del territorio donde ha habido mucha participación en las acciones del proyecto para preservar y adaptar la región.
Una imagen de la laguna de La Tancada en las Terres del Ebro
Las tierras más sensibles al cambio climático
Las Terres del Ebre es la región catalana con los riesgos climáticos más evidentes --impactos ambientales, sociales y económicos--. El proyecto Life Clinomics ha participado en la búsqueda de acciones y modelos de gobernanza participativos e inclusivos en virtud de aumentar la resiliencia del territorio y su actividad socioeconómica. Durante la primera fase del proyecto, se ha reunido información suficiente para ejecutar planes en el sector turístico, en la agricultura y la pesca, que representan las principales actividades económicas de la región.