La constructora Limak ha sido sancionada por exceder los horarios permitidos en las obras de remodelación del Camp Nou. La licencia vigente solo permite trabajar de lunes a viernes de 8:00 a 24:00 horas y los sábados de 10:00 a 20:00, quedando prohibida la actividad los domingos.
Aún así, este domingo la Guardia Civil se presentó en el recinto tras detectar que se estaban realizando trabajos fuera de horario. Ordenó la paralización inmediata de la obra y el desalojo de los obreros.
Para el club, este contratiempo se suma a una larga lista de retrasos, problemas burocráticos y dificultades logísticas que han marcado el desarrollo de las obras desde su inicio, en noviembre de 2022.
La compañía responsable del proyecto, fundada por el empresario turco Nihat Özdemir, recibió una denuncia por incumplimiento de la licencia y deberá afrontar una sanción de 300 euros. Aunque la cifra es simbólica frente al presupuesto millonario de la obra (1,45 millones de euros), el impacto reputacional es mayor.
El incidente ocurre en un momento crítico para el club, que pretende inaugurar parcialmente el estadio el próximo 14 de septiembre, pese a los plazos ajustados y la complejidad de los trabajos.
La decisión sobre la sede del próximo partido contra el Valencia dependerá de una reunión entre el club, el ayuntamiento, los Bombers y la Guardia Urbana, quienes evaluarán el estado de las obras y el cumplimiento de las normas de seguridad.