Gonzalo Gallego, managing director de Cerberus y jefe de inmobiliario
Al fondo Cerberus se le acumulan los problemas. Después del conflicto judicial sobre la explotación de la zona comercial del Port Fòrum de Sant Adrià de Besòs, ahora a la empresa se la vincula con un presunto fraude inmobiliario en Ibiza.
Cuatro familias han denunciado haber sido estafadas con la compra de unos adosados propiedad de Promontoria Coliseum, filial de la compañía norteamericana, por un agente inmobiliario fantasma.
Carlos Alonso Bárcena se esfumó hace cinco años con el dinero de unas viviendas de lujo y las familias no han recuperado ni el capital invertido, ni la casa frente al mar.
Si bien el fondo que en España pilota Gonzalo Gallego --aunque el directivo este septiembre dará un paso al lado-- no es responsable directo de la estafa, sí que debería haber sido más proactivo a la hora de evitar un timo de semejantes proporciones. No se puede manchar así el nombre de Cerberus.
