En solo seis meses al frente de Telefónica, Marc Murtra ha dejado claro que no ha venido a gestionar, sino a liderar. Su papel al frente de la compañía ha sido clave para reactivar el debate sobre el futuro de las telecomunicaciones en Europa, y su voz ya suena con fuerza entre los grandes del sector.
Murtra ha sido uno de los impulsores de una carta conjunta firmada por 20 grandes empresas del 'viejo continente', en la que piden a Bruselas un cambio urgente en las normas que regulan las telecomunicaciones y las fusiones entre operadoras. La idea es simple, pero poderosa: menos operadores, más grandes, más fuertes y más preparados para competir a nivel global. Y Murtra lo está diciendo alto y claro.
Además, no se ha quedado en las palabras. Desde su llegada, ha movido ficha dentro de Telefónica para adaptarla al nuevo escenario, apostando por los mercados europeos clave y dejando atrás países más inestables. El objetivo está claro: tener una empresa más sólida, con más músculo financiero y preparada para crecer.
Su capacidad para influir ha sido reconocida con su entrada en la Mesa Redonda Europea de Industriales, uno de los foros más importantes del continente. Y el mercado también lo ha premiado: las acciones de Telefónica han subido casi un 14% desde que asumió el cargo.
Marc Murtra no solo ha tomado las riendas de Telefónica; sino que se ha convertido en una de las caras visibles del cambio que proponen para Europa. Con visión, valentía y muchas ganas de hacer las cosas de otra manera, está marcando el rumbo de todo un sector.