Dani Cornellá
La visita del rey Felipe VI a Barcelona este miércoles estuvo marcada por una tensión política discreta, pero inevitable, sobre todo entre los sectores indepes, que siguen anclados en otra etapa.
Mientras los Reyes presidían con normalidad la entrega de los Premios Princesa de Girona en el Gran Teatre del Liceu, unas 150 personas se manifestaban en la Rambla y en la plaza de Sant Jaume; entre ellas, el diputado de la CUP Dani Cornellà.
El otrora alcalde de Celrà, donde ya apuntaba maneras, se dio de bruces contra los agentes de los Mossos d'Esquadra, en una nueva performance nacionalista, que pierde participantes en cada una de sus actuaciones. Lejos están de la capacidad de movilización del momento álgido del procés. Pero se empeñan en tener protagonismo.
Los gritos de protesta se colaron brevemente en el interior del teatro. Minutos después, la protesta se disolvió sin más, y la Rambla volvió a llenarse de turistas y paseantes, como si nada hubiera pasado… o como si lo de siempre volviera a quedarse en eso: ruido y poco más.
