
Jordi Robinat, en una conferencia inversora en Suramérica
Cabe agredecer al empresario inmobiliario Jordi Robinat que se comprometa de nuevo con el proyecto de Bonmont Hotel Golf & Spa de Tarragona. Lo lanzó su empresa MedGroup en 2008, pero jamás vio la luz.
Con la propiedad de Grupo Empresarial Costa, su empresa, que ahora se llama Arum Group, se cierne de nuevo sobre este resort de alojamiento y golf de 230 hectáreas en Montroig del Camp.
Es, en teoría, una buena noticia para la región, puesto que pocos empresarios españoles distintos a Robinat conocen el mundo de los resorts como él.
Eso sí, el directivo tendrá que disipar las dudas que persiguen su gestión desde que muchos de sus proyectos necesitaron apoyo financiero, e incluso de un concurso de acreedores.
Toda aportación local es buena para el macrohotel, pero se deben enmendar los caminos que se tomaron en el pasado, y que llevaron a Bonmont a quedar 20 años cerrado. Porque hay perjudicados: la provincia de Tarragona al completo, y los contratistas e industriales, que quedaron con deudas impagadas del proyecto anterior.
Se estima que hay unos 20 millones de deuda, por lo que Costa y Arum, si van juntos en la iniciativa, deberán cumplir con los acreedores y presentar un plan viable de apertura.