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Oriol Junqueras mantiene su tirón dentro de ERC. El dirigente secesionista ha dado un golpe de efecto al conseguir un elevado número de avales de cara al congreso interno de la formación secesionista de final de mes, en el que aspira a revalidar su cargo de presidente.
A tenor de lo visto, todo parece indicar que sus adversarios del resto de candidaturas lo van a tener muy difícil para disputarle el trono. Y eso que alguna de ellas -en especial, Nova Esquerra Nacional- cuenta con un amplio elenco de mandatarios y primeras espadas de ERC.
A pesar de sus últimos -y grandes- batacazos electorales, Junqueras mueve a la militancia. Y está por ver que sus rivales puedan hacerle sombra en este sentido. Si sale reelegido, su estrategia dentro del partido saldrá reforzada. Y, con ello, su apuesta por seguir colaborando y negociando con el Gobierno de Pedro Sánchez a cambio de más y nuevas prebendas y privilegios para los nacionalistas. Algo que, vistos los ingentes beneficios que les da -indultos, amnistías, cambios legislativos a medida, cesiones competenciales y de todo tipo-, tampoco sería muy diferente con otras candidaturas al frente.