La Copa América de Vela de Barcelona ha comenzado sus grandes concesiones con cierta opacidad. El Experience, el centro de interpretación, ha terminado recalando en el fondo de inversión Stoneweg, cuya cabecera es intrazable hasta Suiza.
Ahora su socio, Dortoka Disseny, del empresario y navegante Josep Gurri, opta a llevar la hospitality de la carrera de regatas. Dortoka, que monta el Christmas Market del Puerto -y que, por lo tanto, posee expertise en grandes eventos- tiene todo el derecho del mundo a acudir a las licitaciones de la Autoridad Portuaria. Al final, estos procedimientos son abiertos a la competencia.
Pero o la aspirante o el Puerto deberían aclarar si se repetirá la operación del Experience: ¿concursa Dortoka por encargo de Stoneweg? Se impone más claridad y menos complejos: hay que explicar los proyectos con honestidad o podría medrar una desconfianza hacia la Copa que le hará un flaco favor.