España ha puesto en marcha diversas políticas de control a lo largo de los años para intentar reducir el consumo de tabaco. Aún así, el porcentaje de fumadores diarios apenas ha variado en los últimos veinte años. Una de sus últimas iniciativas, el Plan Integral de Prevención del Tabaquismo, lleva estancado en el Ministerio de Sanidad desde hace más de dos años. España tiene todavía mucho que hacer en la lucha contra el tabaquismo.