Ada Colau accedió a la alcaldía de Barcelona gracias a su pasado activista, es decir, por su historial de lucha por una vivienda digna. Hizo muchas promesas en este sentido, pero la realidad --es decir, las estadísticas-- demuestran sus incumplimientos, así como el importante papel en la creación de vivienda protegida del sector privado, demonizado por ella.