El jugador Dani Alves ha puesto tierra de por medio tras ser acusado de una agresión sexual en la discoteca Sutton el pasado 30 de diciembre. El futbolista abandonó la sala antes incluso de que el staff pudiese retenerlo hasta la llegada de los Mossos d'Esquadra.
Quien sí prestó declaración fue la víctima, que aseguró que el brasileño le realizó tocamientos por dentro de la ropa interior sin su consentimiento, y que en las últimas horas ha formalizado la denuncia ante la policía catalana, que investiga el caso. Mientras tanto, el futbolista continúa en el país azteca, ajeno a la polémica, y no se ha pronunciado al respecto.