El Govern ha colocado al frente de su energética pública a Ferran Civit, de profesión antropólogo y sin experiencia previa en energías renovables. Con esta decisión, la Consejería de Acción Climática ha priorizado la afinidad partidista --Civit es además la pareja de Meritxell Serret, consejera de Acción Exterior-- por encima de los méritos profesionales, ya que su experiencia en el ámbito es muy limitada tal y como se ha advertido desde el sector. Si el nuevo organismo ya nacía lastrado por su falta de ambición, ya que de momento se limitará a instalar placas solares en edificios públicos, ahora queda manchado por las sospechas de enchufismo.
Teresa Jordà
26 octubre, 2022 00:00Addoor Sticky
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