Mientras siete rectores de universidades catalanas reclamaban una mejora de la financiación y de la gobernanza, Gemma Geis recurría a su mantra independentista. Ocurrió en la Universitat Catalana d'Estiu, que ni es universidad ni tiene influencia, pero año tras año, sirve de altavoz a los dirigentes secesionistas más recalcitrantes. La consejera de Universidades afirma que solo la independencia de Cataluña puede proporcionar la financiación que necesitan las universidades, y que estas no pueden ser neutrales porque la extrema derecha aumenta en los campus. Hay que tener en cuenta que, para Geis, todo aquel que no cree en la secesión es un fascista. Y a sus declaraciones televisivas nos remitimos.