Los Mossos d'Esquadra asumen que la falta de efectivos es un problema generalizado en el cuerpo y que, con un verano caliente en cuanto a delitos en el área metropolitana de Barcelona, se ven obligados a priorizar entre los avisos que reciben. Frenar las okupaciones, como se vio en El Prat de Llobregat, no está entre ellas.
Lo que sí debe ser una prioridad de cualquier Estado de derecho es proteger a los propietarios que denuncian el allanamiento de su vivienda. Por eso, frente a la falta de medios en el cuerpo autonómico, que no puede asumir el problema de la okupación, la Consejería de Interior de la Generalitat, que lidera Joan Ignasi Elena, debe reforzar los efectivos.