Un tema complejo que requiere la implicación de todas las administraciones. La Consejería de Derechos Sociales ha radiografiado los problemas de vivienda que tienen los catalanes, tanto los que viven en barracas como los que carecen de un hogar seguro. El departamento que dirige Violant Cervera avanza en un plan de choque que, sin esas cifras, no sería realista, y que incluye una partida de 98 millones de euros.