El éxito de convocatoria del salón barcelonés del turismo B-Travel, que este domingo cerró el telón con nada menos que 20.000 visitas, supone una bocanada de aire fresco y una inyección de optimismo para un sector que ha sufrido como pocos los daños de la crisis derivada del Covid-19 en los últimos dos años. En tiempos de incertidumbre y crisis económica como los actuales, son muy de agradecer iniciativas como esta en Feria de Barcelona, y las buenas sensaciones que aportan.