Cataluña y Aragón empiezan a encauzar sus diferencias para presentar una candidatura conjunta en los Juegos Olímpicos de Invierno de 2030. Después de meses de tira y afloja entre los dirigentes de ambas autonomías, el trabajo del presidente del COE, Alejandro Blanco, parece empezar a dar sus frutos para reconducir la situación. El acuerdo técnico está cerca y, en cuestión de días, todo debería llegar a buen puerto si se vencen las últimas reticencias expresadas por la parte aragonesa. Es hora de trabajar para que la candidatura sea "imparable”, según las propias palabras de Blanco.