El Institut Agrícola Català de Sant Isidre ha presentado una hoja de ruta para dinamizar la agricultura local con el reto de alcanzar la soberanía alimentaria. El libro blanco de la patronal liderada por Baldiri Ros está estructurado entorno a seis palancas transformadoras, entre las que destacan la gestión centralizada del suministro de agua, la renovación de infraestructuras y el impulso de la biomasa.
La voluntad del Institut es que la "agricultura real" tome forma en las políticas del Govern, que hasta ahora han estado orientadas por razones ideológicas e ineficientes. De este empeño depende que la industria agroalimentaria siga siendo un motor económico en Cataluña. La Generalitat haría bien en atender las demandas del sector.