Rafa Nadal lo ha hecho. Ha aparcado las molestias físicas que le han acompañado en los últimos meses y ha derrotado al número 2 del mundo, Daniil Medvedev, un tenista 10 años más joven y que apunta a ser el sucesor del big three. Sin embargo, para ello deberá esperar a que se retire el español, que le ha remontado dos sets en contra y se ha impuesto en un partido de más de cinco horas para levantar su Grand Slam número 21. Nadie en el circuito masculino atesora tantos. Histórico. Y todos los rivales destacan de él su capacidad de sacrificio y su humildad; nunca tiene una queja ni una excusa. Sin duda, es uno de los mejores embajadores de España y uno de los mejores deportistas de todos los tiempos.