Roger Torrent

La renovación del Pacto Nacional por la Industria no solo es una buena iniciativa, sino una urgencia tras la erosión del Covid-19 sobre el sector industrial catalán. Pero el breve calendario fijado en septiembre por el consejero de Empresa y Trabajo, Roger Torrent, le ha jugado en contra. La negociación de las políticas industriales merece suficiente tiempo y reflexión para concertar las visiones de todos los actores implicados y, sobre todo, no repetir los errores del anterior pacto. Las prisas nunca son buenas consejeras.