El Hospital Vall d’Hebron de Barcelona ha probado en ratones la eficacia de un fármaco contra el neuroblastoma, un cáncer infantil muy agresivo. Investigadores del estudio, cuyo primer autor es el doctor Marc Masanas, han analizado el efecto terapéutico del 4SC-205, un nuevo medicamento que tiene un efecto inhibidor de la proteína KIF11, que regula la división de las células y frecuentemente se encuentra alterada en tumores.
Este tratamiento, que se puede tomar por vía oral, permite administraciones más seguidas con dosis más bajas, de modo que mejora su tolerabilidad. Los resultados de este estudio en ratones, en los que se redujo el crecimiento de los tumores en más de un 90%, permitirán diseñar un ensayo clínico en el que se combine este fármaco con otros medicamentos. Sin duda, este es un primer y gran avance para que los oncólogos pediátricos puedan incorporarlo en el tratamiento de sus pacientes en un futuro y mejorar la vida de estos niños.