El consejero de Salud, Josep Maria Argimon, ha anunciado un nuevo protocolo anti-Covid a partir del lunes. Desde esa fecha, 20 de diciembre, los contactos estrechos de un positivo, estén o no vacunados y tengan o no síntomas, deberán permanecer 10 días en cuarentena, una decisión orientada a frenar la sexta ola en vísperas de Navidad y ante el aumento disparado de casos.
Sorprende, no obstante, que hace apenas tres días el Govern prometió que, a pesar de los "pésimos" datos epidemiológicos, no estaba prevista ninguna medida añadida para combatir la pandemia, más allá del certificado Covid para acceder a los restaurantes, en vigor desde hace unas semanas, y de las recomendaciones de evitar las cenas de empresa habituales en estas fechas. Ya está bien de marear al ciudadano.