Recuperar los test obligatorios de detección del Covid-19 para entrar en España con la finalidad de frenar la nueva variante británica, es la última propuesta de Josep Maria Argimon. Es una medida acertada, aunque el consejero de Salud sabe que se trata de una competencia estatal. Más le valdría intensificar las relaciones con el Gobierno, en lugar de cuestionar los canales de coordinación, como hizo en una reciente rueda de prensa.