El consejero de Interior, en funciones a la espera de que se pueda formar el nuevo Govern, Miquel Sàmper, va en la buena línea cuando señala que se podía abrir el horario de la restauración, con la posibilidad de que los bares y restaurantes ofrezcan cenas en terrazas y en locales con suficiente ventilación. Pero Sàmper siempre se anticipa antes de contar con el consenso interno en el Govern, formado por dos socios peleados desde hace meses, JxCat --su partido-- y ERC, y que ahora intentarán llegar a un nuevo acuerdo de legislatura. Sàmper, si apuesta por esa vía, debería ser más concluyente, y si sabe que no puede anunciar nada porque no está decidido, entonces que guarde silencio.