La posición del secretario de Salud Pública de la Generalitat, Josep Maria Argimon, defendiendo la apertura nocturna de la restauración --"Yo iría a cenar con mi burbuja", ha asegurado-- es una muestra de apoyo que este sector tan golpeado por la pandemia valora muy positivamente.

Sin embargo, no es de recibo que el máximo responsable sanitario del Govern haga estas declaraciones un día después de que el propio ejecutivo autonómico haya dejado fuera de la flexibilización de las restricciones a los bares y restaurantes. Hay decisiones que no se entienden.