La consigna electoral de Junts per Catalunya es proclamar que con un 50% de votos independentistas, la república catalana es posible. Laura Borràs ha hecho suyo ese lema, aunque sabe perfectamente que no es cierto, porque un referéndum requiere de una reforma constitucional. Y si lo que pretenden es lanzar otro órdago a sus rivales de ERC, es que la cosa va de partidismo. Lo cual también supone engañar a su electorado.