Josep Maria Vall Máñez

Barcelona se ha quedado huérfana de una de las grandes fábricas de automoción que integraban el tejido industrial catalán. Nissan ha decidido trasladar su producción y dejar en la calle a más de 3.000 personas. No obstante, el sector del automóvil catalán y español ya buscan alternativas para poder dar trabajo a los miles de empleados.

Josep Maria Vall Máñez, presidente del Clúster de la Indústria d'Automoció de Catalunya (CIAC), será uno de los encargados de la reconstrucción del sector en Barcelona. La asociación explicó  "que hará todo lo posible" para ayudar a la automoción, puesto que los trabajadores de la planta "están altamente cualificados" y son un "equipo muy activo". A su vez, el CIAC considera que es un momento para "remar todos en la misma dirección".