El portavoz de Cs en el Parlament, Carlos Carrizosa, ha protagonizado este miércoles una polémica intervención durante la sesión de control al Govern. Para criticar la corrupción del independentismo catalán, el dirigente naranja se ha referido a los “amigos” de la diputadas Laura Borràs y Aurora Madaula, en referencia a Francesc de Dalmases y Agustí Colomines. Carrizosa debería haber sido más cuidadoso con su discurso, pues no es apropiado apelar a las relaciones sentimentales (presuntas o confirmadas) de los adversarios para realizar una legítima crítica política.