Isabel Díaz Ayuso ha comenzado con valentía su etapa como presidenta de la Comunidad de Madrid. Propone, y lo hace en Barcelona, una alianza empresarial entre la capital catalana y Madrid, que pueda atraer inversiones y sirva para dar un salto adelante en una liga protagonizada por las grandes urbes globales. Díaz Ayuso sabe que su modelo económico, con una fiscalidad más baja, tiene tirón en el empresariado catalán y, a pesar de la polarización política por el proceso independentista, ese proyecto ha sido bien recibido en patronales como Foment del Treball.