La alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet, Núria Parlon, ha actuado con discreción pero mano firme en el caso de los jóvenes magrebíes no tutelados que ponen en riesgo la seguridad de la ciudad. Un caso que ha estallado por la reciente agresión sexual de varios de ellos a una mujer en el metro de la ciudad. Parlon defiende que puso en conocimiento de la Generalitat, hasta en tres ocasiones, la existencia de estos chicos, menores no acompañados y, en ocasiones, indocumentados, a menudo escapados de centros especiales. Pide responsabilidad y recursos a un Govern que se sacude como puede las críticas y peticiones del consistorio.