El presidente de Comsa Corporación ha concluido este mayo una parte destacada de los objetivos de la refinanciación de una deuda que alcanzaba los 719 millones de euros. Ha vendido tres parques de energía fotovoltaica a la multinacional alemana Clere AG.
La operación se enmarca en las desinversiones de la firma. Se unen a la comercialización de Aigües de Cataluña y Comsa Aparcamientos en 2017. Se sigue el buen camino y se cumplen con los requisitos de la banca acreedora. Con todo, el proceso no ha concluido. Los gestores aún deben soltar más lastre para centrar el foco de actividades de la firma. Por el momento, lo han conseguido con éxito.